Operación Unicornio y London Bridge: La realidad supera a la ficción.

Operación Unicornio y London Bridge: los super planes en caso de que muera la reina Isabel II; parece un guión de película pero no lo es.  Es absolutamente una realidad.

Si la monarca fallece en el castillo de Balmoral, entraría en juego un protocolo determinado hasta que el féretro llegue a Londres en un tren especial.

Con todos los ojos puestos en el castillo de Balmoral, donde la Reina Isabel II está bajo “supervisión médica”, la preocupación crece a cada hora mientras surgen las preguntas sobre el futuro. ¿Qué pasará en Reino Unido si llega el momento que todos temen?

Una palabra; Unicornio, así se llama la operación secreta diseñada en el caso de que Isabel II muriera en Escocia. Está prevista la suspensión temporal del Parlamento hasta el funeral y el posterior traslado del féretro en un tren especial desde el castillo de Balmoral hasta el Palacio de Holyrood en Edimburgo.

El féretro sería luego trasladado a la cercana catedral de St Giles, en la milla real de la capital escocesa, donde miles de personas podrían acudir a rendir su tributo final. Un día después, los restos mortales viajarían de nuevo en un tren real desde la estación de Waverly a King Cross en Londres. La Reina podría ser enterrada junto a su esposo Felipe de Edimburgo en la cripta de la capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor.

Sería precisamente cuando el féretro con la Reina llegara a Londres cuando la Operación Unicornio pasaría a ser la Operación Puente de Londres (London Bridge). Hace ahora un año, ya saltaron todas las alarmas cuando una filtración al portal ‘Politico’ anticipó cómo serían los preparativos de la hasta entonces secreta “Operación Puente de Londres”.

Esta incluiría el “apagón” temporal en redes sociales de todas las cuentas de la familia real (que se teñirían de negro con un escueto anuncio sobre lo ocurrido), los diez días de luto, las banderas a media asta y la exhibición del féretro en el Palacio de Westminster. Allí estaría durante tres días para que sus compatriotas acudan a dar la despedida, antes de ser enterrada en la cripta del Castillo de Windsor, junto a la tumba de su esposo Felipe de Edimburgo.

LLAMADA EN CASCADA: “SE RUEGA DISCRECIÓN”
La primera en conocer la “bajada” del Puente de Londres, fuera del entorno de Buckingham, sería la primera ministra Liz Truss, en una breve llamada telefónica. Habría después una “llamada en cascada” a todos los ministros del Gabinete, a los miembros del Consejo Privado de la reina y a los máximos responsables de las Fuerzas Armadas, que darían órdenes para las salvas de honor en todo el país a las pocas horas a lo largo del “Día D”.