Informarse o enterarse, ahí está la nueva cuestión digital

Informarse o enterarse, ahí está la nueva realidad digital.

En México hay 74.3 millones de usuarios de Internet los cuales, usan esa tecnología de información y comunicación con fines de entretenimiento (90.5 por ciento), comunicación (90.3 por ciento) y para obtener información (86.9 por ciento) según la encuesta del INEGI sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información y la Comunicación liberada en abril pasado.

Según la iniciativa la iniciativa NIC México, en México hay 1 millón 134 mil 253 dominios activos con los sufijos .com.mx, .gob.mx, .net.mx, .edu.mx, .org.mx y .mx y el grueso se ubica en el primer grupo donde, los sitios que terminan con .com.mx son 767 mil 084 hasta el 31 de mayo del presente año.

Así que la oferta que tienen los usuarios al alcance de un click es muy amplia. En este espectro, ¿La audiencia digital se informa o se entera?.

Eso depende. De acuerdo con el editor del diario español El País, Antonio Caño, es probable que en los próximos dos años las páginas electrónicas estén llenas de las fake news o noticias falsas como fenómeno para la supervivencia de la nueva era de los diarios digitales.

Hace dos siglos la guerra entre los medios informativos fue por la circulación. Entonces los diarios serios comenzaron a llenarse de información sensacionalista y los escritores dieron rienda suelta a la suspicacia que rayaba en la no verdad.

Luego con la aparición de la televisión y la radio, la información comenzó a dar un vuelco por llenar los ratings con la información al momento aunque, en ocasiones, esta fuera por fuentes no verificadas. A veces ocurrieron historias matizadas de información y estaciones del naciente broadcasting se llenaron de seguidores.

Hoy es una competencia por hits. Los nuevos clientes de servicios informativos en el formato electrónico, antes de preguntar cómo se genera en engagement cuestionan sobre el ranking o número de veces que los cibernautas ingresan a tal o cual sitio web y se genera el mismo factor.

Interesante es la información dada a conocer durante la Segunda Jornada de los Encuentros de Periodismo donde, Antonio Caño, reveló una situación preocupante: en dos años el 50 por ciento de las noticias que circulen por las redes sociales serán falsas.

México ha sufrido ya de una andanada de información falsa.  El año pasado y según datos de la casa encuestadora Parametría, el 40 por ciento de los mexicanos tuvo contacto con noticias falsas durante el período electoral del 2018; el 22 por ciento aceptó que comparte la información sin saber si es una noticia cierta o falsa.

El 88 por ciento, según la misma encuesta que se levantó en abril del 2018, consideró que la difusión de noticias falsas durante el proceso electoral pasado, representaba un “gran problema” y solo el 7 por ciento ve a las fake news como un fenómeno no importante para el proceso electoral.

Tal situación obligó a que un grupo de ciudadanos y periodistas, abrieran el portal verificando.mx que, pese a que se siguen compartiendo informaciones falsas, aún prevalece.

Hoy los microbbloging y plataformas digitales comienzan a caer en cuenta de la gran cantidad de información que circula sin verificarse, por tal razón, han comenzado a cerrar sus contenidos especialmente en Facebook y Google.

No es una cuestión de censura o línea editorial la que debe marcar el criterio en esta nueva era digital sino, es la oferta que se hace al público consumidor en un mundo cada vez más global, pero segmentado.

Los algoritmos ofrecen al consumidor lo que con frecuencia busca y esa, desafortunadamente, es su realidad.

Sí, hay más globalización en la información pero cada vez está más segmentada, por eso hoy la cuestión es, ¿Informarse o enterarse? De eso depende de cada usuario aunque, en la insistente búsqueda de información o fuentes falsas, el propio algoritmo genera una censura para otras fuentes. Así de frío es el mundo de los bytes.