Texas.- Max Verstappen rindió el mejor de los tributos a Dietrich Mateschitz, al entregarle al otro día de su muerte, el triunfo en el Gran Premio de Estados Unidos en Austin y como agregado el Campeonato de Constructores para Red Bull, el equipo la marca que construyó ese empresario.
Sergio ‘Checo’ Pérez terminó en la cuarta posición, detrás de Charles Leclerc , quien se benefició de un safety car para poner delante, y ahora está dos puntos abajo de él en el Campeonato de Pilotos con 265 puntos por 267 del monegasco. Una pobre recompensa para una carrera de mucho mérito para el mexicano.
Sin embargo, Checo Pérez se convirtió en el primer piloto mexicano en ser parte de un equipo Campeón de Constructores.
Red Bull acabó con 8 años de dictadura de Mercedes, que inició en la era híbrida y primer título por equipos para ellos desde 2013. Con este llegaron a cinco títulos de Constructores en su historia: 2010, 2011, 2012 y 2013.
Lewis Hamilton estuvo a punto de ganar su primera carrera de 2022, pero no le alcanzó para contener al final a Verstappen, quien llegó a su décimo tercer triunfo en 19 GP’s disputados para empatar la marca histórica de Michael Schumacher en 2004 y de Sebastian Vettel en 2013.
TRIBUTO A MATESCHITZ
Para los Red Bull la emoción estuvo a tope desde la ceremonia previa donde se rindió tributo a la memoria del propietario del equipo, Dietrich Mateschitz, quien falleció el sábado.
“Danke Didi” se vio en las pantallas con una foto del empresario y como complemento sonó “Start Me Up”, canción de su banda favorita, The Rolling Stones.
Todos montaron neumáticos medios para empezar la carrera, salvo Kevin Magnussen, Fernando Alonso, Mick Schumacher y Yuki Tsunoda.
CHECO, CON TODO TRAS LECLERC Y VERSTAPPEN A LA CAZA DE HAMILTON
Checo Pérez pasó de estar a más de 6 segundos a 2.5 de Charles Leclerc, mientras que Verstappen se puso a 1.2 de Hamilton. Los Red Bull tenían dos misiones. Max, la de no dejar que Hamilton gane y Pérez mantener el segundo puesto del campeonato de pilotos.
Seis vueltas donde las uñas se convirtieron en un recurso no renovable. Verstappen tomó el liderato en la 51 con un rebase de control en frenadas profundas donde demostró lo que lo tiene como el mejor piloto de la parrilla.
En el caso de Pérez no fue lo mismo, el ritmo de Leclerc creció y la medias de Checo comenzaron a ceder así que ahí perdió la oportunidad de ir por el monegasco que se vio beneficiado por las banderas amarillas que provocó Bottas.